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06 agosto, 2007

EL PLACER DE CORRER

Suena el despertador, son las 5:30h, lo apago rápido para no despertar a toda la familia todavía es de noche y me cuesta unos minutos abrir los ojos, cuando lo consigo intento que mi cerebro despierte y empiece a dar las ordenes oportunas para que el cuerpo se ponga en marcha después de un rato consigo vencer la pereza y me levanto intentando no hacer ruido, recojo la ropa que me preparé el día anterior y bajo al piso de abajo. Después de pasar por el baño a descargar lo acumulado durante la noche voy a la cocina aquí esta Koda mi fiel compañera canina, intenta pasar desapercibida pero cuando me ve aparecer tan temprano sabe que toca “fiesta”, me visto y dudo si ponerme manga larga o salir directamente con manga corta aunque ahora hace fresco enseguida empezara el calor así que decido salir de corto, la noche anterior había preparado el frontal pero decido dejarlo todavía es de noche pero ya empieza a clarear el día y va a ser un estorbo mas. Lleno el bidón con agua y cojo un par de barras de cereales con chocolate que meto en la riñonera no me olvido de coger también alguna galleta para Koda ella también tiene derecho.
Salgo de casa aun de noche son las 6:15 y empiezo con la primera cuesta de la jornada que lógicamente hago andando los músculos se están despertando aún y es mejor no forzar, enseguida salgo del pueblo y estoy en pleno campo aquí dejo ya suelta a Koda que empieza a ir y venir. Sigo subiendo a ritmo tranquilo cuando llego al final de la cuesta miro hacia atrás y veo el pueblo a mis pies con las luces todavía encendidas es una bonita vista. Me dejo de poesía y empiezo a correr voy con cuidado pues aun no se ve bien y no quiero tropezarme con ninguna piedra, me encanta el campo a estas horas con esta luz tenue y los pájaros que empiezan a despertar con sus cantos. Sigo corriendo he hecho bien en no traerme la sudadera pues ya tengo calor, Koda va a su aire de repente se para a olisquear algo y cuando ve que me alejo se hace su particular serie hasta que me alcanza, llego a un cruce y decido tomar un camino por el que no he ido nunca ya se sabe “la aventura es la aventura” al principio voy por campos de cereales con su color dorado aunque la mayoría han sido ya segados, en primavera cuando las espigas estaban todavía verdes lo que mas le gustaba a Koda era correr entre ellas desaparecía de mi vista y lo único que veía eran las espigas moviéndose por donde ella iba.
El sol ya esta a saliendo y yo empiezo a subir otra cuesta, el paisaje empieza a cambiar aquí se mezclan los olivares con zonas de arbustos y pinos el camino es mas estrecho y con muchas piedras lo que me provoca algún que otro tropezón, es que soy demasiado torpe, al llegar a un olivar el camino se corta veo que enfrente sigue, así que atravieso por entre las olivas hasta llegar al otro lado.
Llevo mas de una hora corriendo paro a beber algo de agua y me como 1 barra de cereales, le doy también agua a Koda, todavía no hace calor pero con la mata de pelo que tiene debe de ir bastante calentita, continuo corriendo, desde que he salido de casa no me he encontrado con ninguna persona y lo normal es que no vea a nadie en todo el recorrido, supongo que por eso me gusta correr por el campo, soy una especie de lobo solitario je, je, je, de joven nunca se me dieron bien los deportes de equipo bueno la verdad es que de joven casi no practicaba deporte, hasta que en la mili me hicieron descubrir lo que era correr y desde entonces no lo he abandonado, gracias mi sargento.
El sol ya empieza a calentar, el terreno es un continuo sube y baja y Koda se entretiene persiguiendo los conejos que aparecen por suerte nunca caza nada. Voy siguiendo caminos que creo que me llevan de vuelta al pueblo enfrente a lo lejos veo la Sierra de Altomira tengo la idea de hacer toda la cuerda de cumbres desde el Pico del Buitre hasta Altomira lo que pasa que desde el pueblo ida y vuelta me salen cerca de 50 km así que lo dejare para el invierno cuando este preparando los 101 de Ronda , la Marató i Mitja de Penyagolosa o alguna locura de esas que tengo en mente.
Espero no dar muchas vueltas porque me estoy quedando sin agua llego al final de un camino que también acaba en un olivar no se si volverme, al final decido atravesarlo, se la dirección que tengo que llevar y después de un rato veo la ruta que tengo que tomar que me va a llevar hasta el pueblo, cuando salgo al camino me encuentro al guarda del coto en su 4x4, todo el campo alrededor del pueblo es coto de caza ahora esta todo tranquilo pero en invierno se pone muy peligroso con cientos de cazadores disparando. Se para y me dice que tengo que llevar a la perra atada no discuto con el, ya lo he hecho otras veces y no sirve de nada, así que ato a Koda y cuando desparece de mi vista la vuelvo a soltar, ya voy llegando estoy cansado al final me van a salir casi 2 horas y media, cada vez me gusta mas hacer salidas largas es una enfermedad extraña esta que tengo ¿tendrá cura?. Cuando llego a casa todavía están todos durmiendo hago unos estiramientos, me ducho y me vuelvo a meter en la cama mi mujer se despierta y me pregunta ¿de donde vienes tan temprano? Sigue durmiendo cariño he dado un pequeño paseo con Koda.

Felices vacaciones