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15 marzo, 2011

III CARRERA POPULAR "LA VIÑA DEL AJO"

La crónica de esta carrera se puede resumir en un par de palabras, superación y organización.

Poco a poco esta prueba se esta haciendo hueco dentro del calendario de carreras populares de la provincia de Segovia.

Desde ésta última edición del pasado domingo, está dentro del circuito selecto de carreras pedestres de Segovia donde se codean con carreras de mas renombre en la provincia y de mucho mas presupuesto, como puede ser la de Cantalejo, que puede triplicar, y me quedo corto, en cuanto a presupuesto y número de habitantes.

Muñoveros 13 de Marzo de 2011. Los habitantes de la localidad segoviana madrugan para tener a punto cada uno de los detalles con que una carrera tiene que dar la talla, avituallamientos, vallas, entrega de dorsales, arco de llegada, megafonía, podium, cronometradores, carreras infantiles, servicios sanitarios, guías de recorrido, coche escoba, marcación de recorrido y puntos kilométricos, seguridad del trafico etc..

Mientras todo esto sucede, poco a poco la localidad, con no mas de 300 habitantes, se ve invadida de colorido por parte de corredores, aficionados y familiares que acompañan a estos que empiezan ya temprano a retirar sus dorsales con su bolsa de corredor, mientras los mas madrugadores se pasan por el bar a tomar un café o a trotar por las calles de la localidad. Como el tiempo acompaña la plaza del pueblo se ve abarrotada de gente (ni en fiestas) realizando los últimos preparativos e inmortalizando los momentos con fotos entre compañeros, amigos y familiares.

Cinco minutos para la salida advierten desde megafonía y los corredores que por los aledaños están calentando acuden a la llamada. Los pocos dorsales que no se han recogido se ofrecen para los corredores sin dorsal que no han querido perderse esta cita. Las 11 en punto de la mañana y desde megafonía se solicita un minuto de silencio por las victimas del terremoto de Japón a la vez que repican las campanas de la iglesia.

La cuenta atrás comienza 10, 9, 8 ,7... los corredores gritan para aliviar los nervios, 3, 2, 1, y chupinazo para el comienzo de la 3ª edición de la carrera “La viña del ajo”. La salida ordenada por la calle principal del pueblo hacia las afueras, parece la serpiente multicolor que cuentan de las carreras ciclistas, somos 300 dorsales pero parecen muchos más. Desde mi humilde opinión el recorrido que transcurre por caminos veredas y monte bajo, esta espléndido y acoge a los corredores con sus múltiples colores y olores entre otros a jara y pino piñonero, arropados por el frescor del río Cega que esta vez viene bien, contrastado con el calorcillo que nos ofrece esos rayos de sol con los que días atrás no contábamos.

El buen ambiente entre los corredores les permite durante los primeros kilómetros ir conversando y comentando el trazado. Los 14,5 Kilómetros de la prueba están salpicados por habitantes de la localidad que con sus coches se han desplazado para animar a los corredores, pero es sobre el kilómetro 7,5, cuando de nuevo se toma contacto con la localidad, donde la mayoría del publico anima a todos los corredores, locales y no locales, y les transmite fuerza para afrontar la segunda parte del recorrido. La misma situación se describe en la llegada, al ver el arco de llegada y la gente aplaudiendo se te olvida los kilómetros recorridos y entras como si llevaras alas en los pies. Reencuentro en la llegada con familiares y amigos, y mientras repones fuerzas con las bebidas la fruta y el bocata de jamón, compartes sensaciones y experiencias acontecidas durante la carrera.

Llega la hora de la entrega de premios y comenzamos por las carreras infantiles que se han desarrollado al mismo tiempo que la carrera absoluta. El “speaker” va llamando poco a poco a los chavales ganadores que recogen sus medallas orgullosos, al tiempo que la plaza abarrotada aplaude y anima mientras degusta dulces y vinos de la localidad. Adrián hijo de David “pilla” metal en su categoría. El turno para los mayores también es emocionante y lleno de expectación por los podium locales, pues nadie se lo quiere perder. Inmaculada Álvaro (mi Hermana) sube a lo más alto del cajón para recoger su botella de vino por ser la primera local. Dinámica y con ritmo, la entrega de premios finaliza con un sorteo de una cena para dos personas entre los dorsales de la carrera, (la suerte no nos sonríe) pero regresamos a casa con la satisfacción de que hemos dado lo mejor de cada uno, en la carrera y en la organización aportando nuestro granito de arena, para que la gente que nos ha visitado hoy, quiera visitarnos el año próximo.

Mas información: http://www.asociacionlafragua.com/eventos.php?id_evento=13


3 comentarios:

Carles Aguilar dijo...

Tiene que ser, a juzgar por lo leído, una carrera muy atractiva y además me ha encantado la crónica.... Algún día me gustaría venir...!! Saludos..

Pietro Menea dijo...

Carles, Gracias por tu comentario.

Enhorabuna a Muñoveros y los que hacen posible esta carrera.

Kalili, muchas gracias por dejarnos tu cronica.

Un saludo a tod@s

Manuel Díaz dijo...

Esta carrera me recuerda aquella fiesta que decía:
En la fiesta de Blas todo el mundo salía con unas cuantas copas de más. Felicidades por la crónica compañero.