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02 junio, 2009

La meta bajo la higuera

Después de bastante tiempo sin correr con regularidad he decido volver a trotar.

Esta semana quisiera participar en los 10 km. de Torrejón por lo cual debo entrenar un poquito para acabar la carrera.

Hoy he empezado a correr a las Ocho de la tarde , pero todavía hacía bastante calor. Inicio el recorrido y tengo como referencia una vieja higuera que se encuentra en el borde del camino. Es raro ver esta especie por estos lugares pero me agrada observala y me transporta a otros lugares más rurales, aquellos otros que no estén tan contaminados como los sufridos en una gran ciudad.

Al final he aguantado unos 45 minutos, que no está nada mal teniendo en cuenta el axfisiante calor.

He llegado a mi meta, he vuelto a contemplar a la vieja higuera y me he sentado al lado de su tronco, refugiándome en su sombra.

¡Prueba superada!

A lo largo del camino me crucé con muchos corredores, he podido contarlos:

un total de 36. ¡Pues si que hay gente que sale a correr!

Aquí os dejo una pequeña información sobre la higuera por si te pudiera interesar:


Hay muchas cosas que hay que plantearse antes de decidirnos a plantar una higuera (ficus carica) en el jardín. Este árbol perenne de la familia de las moráceas de hasta 4 metros de altura es mucho más ancho que alto, así que lo primero que hay que tener en cuenta es que la higuera es especialmente grande por lo cual sólo lo incluiremos en nuestro jardín si es que tenemos un gran espacio. Además, la higuera no podría ir colocada en un espacio que sería susceptible de molestar a otros vecinos (casos de chalets adosados), puesto que el crecimiento de la higuera es muy difícil de controlar y es capaz de levantar el pavimento.
La próxima vez que llegue a la higuera, espero que ya tenga su fruto maduro. Lo que pasa que todavía temprano. En el pueblo hasta finales de verano no podemos recoger los higos. Y ahora que lo pienso, esta sería una buena forma de acabar el entreno. Sentado bajo una higuera, reponiendo fuerza con los higos.
Pero eso es otra historia.

4 comentarios:

Pietro Menea dijo...

Ese es mi Manolin,

Se echaban de menos tus cronicas mundanas llenas de romanticismo.

Nos vemos el domingo, hazte otro par de salidas, si puedes.
Tendremos que madrugar un poco, la cosa no me huele bien.

Manuel Díaz dijo...

Esto es un jipi que se estaba comiendo unos higos subido en una palmera.
Llega un colega y le pregunta:
-¿qué haces ahí arriba?
y el jipi contesta:
- Pos comiéndome unos higos.
Entonces dice el colega, pero si las palmeras no dan higos
y responde el jipi... yo me he comprado los higos y me los como donde me sale de los...

Gregorio Toribio Álvarez dijo...

Eso está muy bien, el volver a intentar trotar un poco. Seguro que te pones medio a punto para la carrera.

¡Qué bueno el chiste, jejeje!

Juan Carlos dijo...

Bueno el chiste, casi me dan ganas de piratearlo para mis lunes humorísticos. Lo bueno de las higueras cuando hace calor es la sombra fresquita que dan pero aún recuerdo a mi abuelita la de León diciéndome que ni se me ocurriera ir a dormir la siesta a su sombra que me pondría malo. ¿De dónde saldría esa conseja? El caso es que nunca me dejaba. Ahora que para comer el bocadillo de chorizo si.